No se trata solo del Esequibo

11 de noviembre de 2011

Tomado de analítica.com

Reiteramos que el silencio de la cancillería venezolana puede configurar una aceptación de hechos que disminuyen considerablemente nuestro derecho a tener una plataforma continental que se proyecte hasta 350 millas de la costa venezolana

Lamentablemente frente a los oídos sordos del gobierno se apagan, poco a poco, las voces que reclaman la defensa de los intereses y de la integridad nacional.

No se trata de lo que pueda o no obtenerse en la reclamación del territorio Esequibo, sino de la defensa de la plataforma deltana. Sin una solución a la reclamación con base en el Acuerdo deGinebra resultará cuesta arriba resolver favorablemente para Venezuela la delimitación de áreas marinas correspondientes a nuestra proyección atlántica.

Pero lo peor del caso es la terquedad y el silencio de la cancillería al no producir las notas diplomáticas mediante las cuales Venezuela reclama públicamente que se respeten sus derechos en la plataforma continental deltana. Las protestas necesarias, es más indispensables son: 1) Al Tribunal del Mar por el laudo emitido con respecto a la delimitación entre Surinam y Guyana 2) A Barbadospor desconocer el tratado firmado entre Trinidad y Venezuela 3) A Guyana por la extensión de su plataforma hasta las 350 millas desconociendo los derechos de Venezuela y por último notificar a las Naciones Unidas de la existencia de esas notas diplomáticas y rechazar cualquier decisión unilateral que puedan afectar nuestra proyección en el Atlántico hasta tanto no se haya resuelto de manera satisfactoria para ambas partes la reclamación del territorio Esequibo.

Reiteramos que el silencio de la cancillería venezolana puede configurar una aceptación de hechos que disminuyen considerablemente nuestro derecho a tener una plataforma continental que se proyecte hasta 350 millas de la costa venezolana y por lo tanto configurarían, de no emitirse oportunamente las notas de protesta, la mayor cesión de territorio en la historia de Venezuela. El deber de todos los venezolanos es reclamarle al gobierno que cumpla con la Constitución y haga todo lo necesario para preservar la integridad territorial de nuestro país.