José Vicente Rangel |
Tengo el honor de dirigirme a Vuestra Excelencia, en la oportunidad de hacer referencia al contrato recientemente suscrito entre el Gobierno de la República Cooperativa de Guyana y la empresa estadounidense Beal Aerospace Technologies Inc., para la construcción de una base para el lanzamiento de cohetes en el área entre el río Guainía y el Atlántico, zona sujeta al Acuerdo de Ginebra de 1966.
Al respecto, deseo expresar, a nombre del Pueblo y el Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela, una firme protesta y rechazo a este acto inamistoso, el cual obstaculiza alcanzar una solución práctica y satisfactoria a la controversia territorial entre nuestros dos países, y no se ajusta al espíritu de entendimiento y cooperación establecido en el Acuerdo de Ginebra, así como las tradicionales buenas relaciones de amistad entre Caracas y Georgetown.
Así mismo, Venezuela deplora que su compromiso con el diálogo de buena fe a través del proceso de Buenos Oficios que se adelanta bajo los auspicios del Secretario General de las Naciones Unidas y su Representante Personal, Embajador Oliver Jackman, no sea correspondido por la actitud del Gobierno de Guyana.
Mi Gobierno es de la creencia que Guyana acompañará a Venezuela en el mantenimiento de una atmósfera de mutua confianza y espera un cambio de actitud de su Gobierno, que permita avanzar prontamente hacia la solución práctica y satisfactoria de la controversia territorial. En consecuencia, Venezuela espera que el Ilustrado Gobierno de la República Cooperativa de Guyana reevalúe su política de concesiones en la Zona en Reclamación, en este caso y otros análogos, tomando en cuenta las implicaciones que éstas acciones tienen sobre el referido proceso, en particular, cuando éstas involucran la participación de terceros, situación que complica aún más la ya compleja cuestión del Esequibo.
Deseo reiterar que, de acuerdo a lo establecido en el Artículo V del Acuerdo de Ginebra, ninguna actividad llevada a cabo mientras éste esté vigente, constituirá fundamento para reforzar, apoyar o denegar un reclamo de soberanía territorial, ni creará derechos en el territorio reclamado por Venezuela, excepto que dichos actos o actividades sean resultado de cualquier acuerdo alcanzado y aceptado por escrito, por ambos Gobiernos.
Ante la situación, me permito invitar a Vuestra Excelencia a efectuar a la brevedad posible, una reunión en la cual revisaremos éste y otros asuntos que inciden en nuestras relaciones.
Acepte, Excelencia, las seguridades de mi más alta consideración.
José Vicente Rangel
Al Excelentísimo Señor
Clement Rohee
Ministro de Relaciones Exteriores de la
República Cooperativa de Guyana
Georgetown
Fuente: Libro Amarillo, 2000, 645-646
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